Ella

Delgada y ligera, surca y delinea los delicados trazos de su cuerpo lleva por color rojo su blusa entretanto me pierdo en sus ojos negros infinito, en su piel lecho alcanzan mis fantasías, es ella, la chica de rojo, donde mis sueños, sueños no son, realidades ahora son. Ella la dueña de mi tiempo, la fiel aurora de la mañana, ella mi dulce compañía, en la cual no se donde termino yo y comienza ella, a ella todo mi amor.

Una vez en la vida.

Sin duda alguna me atrevo a decir, sin ánimo de causar molestia alguna a los juerguistas de la amistad, aquellos que sin criterio alguno llaman amigo a tal y cual, producto de una realidad como las redes sociales donde el valor de la palabra “amigo” ha perdido todo su valor semántico y bohemio, es por eso que con miedo a ser acusado de “fundamentalista” de la amistad, correré el riesgo, seré llamado; terrorista, mendaz y hasta ¡mamerto!

La amistad como tantos otros agentes que incurren en el diario vivir se presentan a nosotros como oportunidades únicas y solo el valiente que ose a tomarlas es quien poseerá un tesoro de sin igualable valor y trascendencia que poblara su existencia de alegrías y sin sabores como ningún otro.

Se pueden distinguir varias clases de individuos a los cuales en hogaño responden a la palabra de amigo:

• Están los Compañeros de Joda: Listos y dispuestos para todo aquello que le propongas hacer o beber, esos sin duda hacen que tus horas se llenen de diversión pasajera, logran esfumar y fumar Horas y horas... Convierten la realidad en momentos fugaces de Diversión. Pero estos solo los logras ver de vez en cuando, tienen un periodo de Hibernación que va desde cada día lunes a las 100 horas hasta por lo general los días viernes a las 1900 horas. 
• Están los pañuelos de Lágrimas: Buenos consejeros con los que cuentas siempre que estas triste, siempre que quieras llorar, aquellos que te recuerdan cuanto en realidad vales y que hay algo por lo que despertar cada día, Con estos quizás se es más desagradecido, luego de desahogar tu alma, de dejar vacío la bolsita de tristezas, no vuelves acordarte de ellos, hasta la próxima borrasca de melancolía, ellos quedan en un olvido pasajero hasta que las lágrimas los llamen de vuelta. 
• Están los que se ríen contigo y de ti: Los bufones del diario vivir, los que te hacen pasar momentos inolvidables, logrando robar millones de sonrisas a tu rostro, esos que siempre tienen algo que decir o hacer solamente para sacar una carcajada de ti, estos son los menos valorados, se ven cómo con quienes puedes llegar reír por un rato pero no para rato, con quien compartir momentos cortos de ocio, a estos casi siempre los apartas cuando necesitas dar un giro de seriedad a tu vida, cuando caes preso del eufemismo de la duda existencial. 

Sin escapar a alguna otra denominación de la amistad están por ultimo aquellos que te acompañan a cualquier lugar al que decidas ir, esos que pueden dejarte sola en los momentos en que necesites estar contigo mismo, aquellos con los que ríes todos lo días, compañeros con los que te vas de joda el fin de semana, además sabes que puedes contar con ellos cuando en verdad necesites un apoyo, cuando necesites alguien que te escuche, que te aconseje o que permanezca en silencio.

Sin Duda un Amigo es aquel con el que Puedas reír, llorar, soñar, pelear, festejar, compartir, Un amigo es quien puede reunir todas las cualidades y defectos para ponerlos a tu servicio, Estos son los que sin duda quedan en tu corazón por tanto tiempo como decidas,
compartirá tus tristezas y tus momentos de alegría y triunfo. Sin embargo los fantasmas del olvido pueden posarse sobre ellos, si dejas a una amistad en los anaqueles de tu vida seguramente el olvido la cobije.

La vida se resume en una conjunción de pequeños instantes, los recuerda por momentos compartidos y personas con las que compartiste, los amigos, los verdaderos son la prueba fehaciente de tu existencia, son la memoria de tu pasar por el mundo, son aquellos con los que puedes recordar y contar las lágrimas, sonrisas y experiencias vividas, ellos los amigos que están junto a ti en el transcurso de tu ser, ¡Ellos! son los que pasan una vez en la vida.

Podrá no haber poetas... # 3

Lúgubre crepúsculo de melancolía

Estolidez que ahogas mi ser

Silencio que susurras soledad

Temor ardid que te posas en mi.

Morirán las palabras

Se marchitan hoy los tenues instantes del ayer, aún así lleva mi boca intacto el sabor de tus labios y aunque el olvido se lleve tu ausencia, son mis suspiros y mis lágrimas las que se aferran a tu recuerdo, preso soy de nuestras noches, nuestros días. Habito aún el mundo construido, duermo junto a los sueños compartidos, al despertar se que ha de morir todo.

Morirán las noches de soledad, morirán los días con tu recuerdo, morirán los besos, las caricias y el cuerpo donde moraban, morirán las miradas y los susurros, morirá la imaginación junto al aroma de ti al amanecer, y aun así nadie de pena muere.

Pero morirán mis versos, mis poemas, mis canciones, mis cartas, morirá mi locura… Y morirán mis palabras pues estas en cada una de ellas, morirán mis sentidos y  morirá quien solía ser en ti.

Morirán las palabras, aún así, el adiós, no.

Podrá no haber poetas... # 2

Hálito de nostalgia acaricia mi ser,

Palidecen mis sentidos en silencio,

Alma mía que se ahíta de la soledad,

Versos ávidos de ti,

Pernoctan en las sombras de la consciencia.

Temo confesar que me gustas.

De mi lo tomas olvido,

Recuerdo del ayer es hoy,

Día en que te conocí,

Fugaz tu dulzura fue,

Mas nunca efímero el instante,

En que mi boca probo de ti.

Cuerpo Rígido de deseo,

Placer de mis sentidos,

Pardo por color tu piel,

Y blancas tus colinas son,

Que en tu pecho duerme mi delirio,

Enmudecen mis palabras en ti.

Escribo, Pues Temo Yo,

Confesar que me gustas,

Adicto soy de ti…

Tarta de Coco.

Amaneceres rotos.

Un día, tan común como hoy y solo distinto de ayer por el color de su cielo. Él, cuyo nombre no sabemos, puesto que no importa para el relato de hechos simples, tales como son los sentimientos más profundos de su ser, pues ¿Quién es el espectador de una obra? ¿Aquel que construye un mundo de ficción a través de un personaje contenido en un relato? ó ¿Aquel del que todo sabemos sin conocerle, usurpadas sus experiencias son, por otros que dicen vivirlas? Al final el espectador y el protagonista coinciden en aquella rutina, esa a la que llaman vivir. Él, que solo conocemos entre versos:

Él, que en un día común, en un ayer similar, se pregunta; ¿Para qué los puntos y aparte? ¿Para qué el silencio? Después de todo, la poesía es solo una fábrica de ilusiones que pinta de fantasía un mundo a blanco y negro, pero cuando cae el telón, la magia muere con el fin de la función, quedan tan solo, los amaneceres rotos.

Hacer memoria es olvidar.

Lo primero que recuerdo es ver el mundo en tus hombros, tus historias, nuestros viajes, tu mirada distante, y como reposan en la memoria fríos epitafios del ayer.
Recuerdo lo que fue y no fue, recuerdo ser solo el dueño de tus instantes, espectador de tus momentos, y te recuerdo ausencia como si habitara en ti, tu partida, nuestro olvido, son en eco en mis tardes de lo no sucedido.
Recuerdo tus besos y viene a mis labios el silencio de tu boca, te recuerdo porque en ti soy.

 Los sueños que en recuerdos quedan  y parecen absurdas realidades de la imaginación, y entre tanto que recuerdo no me topo contigo olvido.  Paradójica tu lógica que entre un recuerdo y otro, consigue mi memoria dar con el olvido.

Podrá no haber poetas... # 1

Conciencia impávida del silencio,
alma ignota que vives anónima,
inefable sentimiento de acíbar,
elocuente nostalgia que he de olvidar.